Cambio Panorámico

Al final hay que mirar por uno mismo, pero no puedes evitar sentir un pellizco cada vez que hay algún cambio en tu vida. Si echamos la vista atrás tampoco hace tanto tiempo, pero eso es algo relativo. Si medimos el tiempo en horas o días tal vez parezca poco, pero si lo medimos en vivencias y anécdotas y cosas que quedarán para el recuerdo...ha sido mucho.

Hace un año, también por estas fechas me despedía, no estaba seguro (al igual que ahora) de que fuera un adiós, al final por vueltas que da la vida "volví con papi" como dice aquel. Y no, no me arrepiento de irme ni de volver, porque tengo mucho que agradecer a Panorámico en general y a Vilches en particular, porque después de casi dos años en paro y aun a fuerza de mucho me dió una oportunidad de formar parte de esa familia Panorámica, que crece cada año y donde a pesar de lo mal que se pasa a veces...jamás se puede olvidar. 

Esa fue la última foto, del último atardecer que pasé como trabajador espartano de un sitio maravilloso con unas vistas fantásticas, pero si genial es el sitio, mejor aún son los que trabajan. Los Espartanos de Panorámico, allí te transformas en un guerrero de la barra y la bandeja, si sobrevives una vez, te conviertes en inmortal. Además una cualidad que tenían los espartanos y que los de panorámico comparten es la solidaridad y la capacidad de sufrimiento. Nunca verás a un espartano de panorámico dejar a un compañero caer. Luchamos juntos, ese podría ser el lema de los currantes.

Y claro, con tanto sacrificio al final pasa lo que pasa, que de compañeros pasas a convertirte en amigo y de amigo a hermano. Trabajando así es imposible que nadie pueda contigo. Como decía al principio cada vez que algo cambia siempre notas ese pellizco en el corazoncito que te hace que te plantees por última vez ese cambio. Son mis espartanos, los quiero a todos, porque todos han sido compañeros, he estado más o menos tiempo con ellos, pero si están en panorámico es que algo tienen, aunque a veces cueste verlo. Pero hay tres a los que dejo allí y sé que voy a echar mucho de menos. El orden es irrelevante así que no le deis importancia a eso.

Si hay un tio capaz de hacer 74573923745 cosas a la vez ese es el de la foto. Chico es un tio de puta madre, capaz de estar con la bandeja llena, limpiando las mesas y tomando nota a un guiri en un idioma en el que ninguno de los se entera. Siempre tiene una sonrisa, un chiste y por supuesto, una cerveza. "¡¡Aquí están los calentitos!!" Ahora el que te va a pedir los calentitos de aquí a unos años va a ser el minichico ese que te espera en casa. Dale duro amigo, y.... ¡¡¡NOS VEMOS EN LOS BARES!!!

Ella me convirtió en su hermano mayor, y yo acepté encantado, cuantas historias, cuantas charlas pero sobre todo... cuantas copas. Siempre sonriendo, con esa mirada de niña traviesa, curranta como pocas y una persona a las que es fácil querer, siempre ofreciéndose para ayudar y, si por cualquier cosa necesitas sonreír...ahí está ella para sacarte una sonrisa. Otra de esas personas que pasa a formar parte de tu día a día, aunque no la veas siempre está ahí. ¡¡¡MI PEQUEÑAJA!!!

La culpa que seamos espartanos la tiene él y alguna foto que el día que vea la luz dará mucho que hablar... pero no seré yo quien la publique, aunque ganas no me faltan. Nos hicimos amigos por cojones, navidad y fin de año juntos en Panorámico une mucho. Si además de eso añades que está loco perdido y que siempre está bailando y sonriendo pues ya tienes todo lo necesario para tener un compañero de trabajo genial. Muchas carreras, muchos kilómetros detrás de esa barra, muchos cócteles y mucho café y chocolate blanco... él me bautizó como "El Barista sin Sonrisa". Es, posiblemente al que más voy a echar de menos de los tres. ¡¡¡NAUFRITI QUERIDO!!!

Y yo pensaba que iba a echar mucho de menos los atardeceres, que en Panorámico son simplemente espectaculares... pero gracias a Dios en mi nueva parada tampoco son feos. Solo puedo deciros que las copas os la toméis en Panorámico, que es donde mejor saben, pero la cerveza... para la cerveza os espero en "El Jardín de la Cerveza de Rubens", que además los atardeceres tampoco envidían tanto a los de El Rompido

Gracias a Panorámico por este tiempo allí, espero que El Jardín de la Cerveza me haga disfrutar tanto como lo he hecho allí.